Toma de posesión de Fr. Mariano González Martín, OP, como Prior Provincial de la Provincia Misionera de Nuestra Señora del Rosario.
A las 8,00 de la mañana de este sábado 23 de agosto, memoria de santa Rosa de Lima, los frailes capitulares iniciaron el día con el rezo de laudes y la eucaristía en el templo parroquial del Real Monasterio de Santo Tomás en Ávila.
Presidida por fr. Mariano y concelebrada por los ex provinciales fr. Rubén Martínez y Fr. Javier González esta celebración eucarística giró en torno a la renovación que tiene que haber en cada seguidor de Cristo y en Iglesia. La celebración eucarística comenzó con palabras llenas de agradecimiento a fr. Rubén Martínez y a su equipo de gobierno provincial por todo el trabajo realizado durante sus cuatro años como Prior Provincial. Después de que fr. Javier González diera lectura al documento de aprobación y confirmación del Maestro de la Orden, fr. Mariano hizo profesión de fe con su mano sobre el Evangelio.
“Que todo sea nuevo, nuevo en la humildad, atendiendo aquello a lo que se nos viene encomendando”, señaló el provincial, refiriéndose a la primera lectura.Habló también de la parábola de los talentos, “me gusta mucho la parábola donde Jesús nos habla del buen hombre que multiplicó sus talentos”. “Hoy es un día para que todos pongamos nuestros talentos al servicio”. “Me gustaría dentro de cuatro años al finalizar mi periodo como provincial, entregar otros diez talentos” dijo el provincial. También hizo referencia que dentro de esa entrega de talentos hay que hacerlo con respeto a través del amor. ”Entregar el talento es despojarse, es darse” pues acotó que “hoy se corre el riesgo de que nuestra vida sea una mentira por la falta o el miedo a ser señalado o criticado”. Recordó a fray Felicísimo al inicio del capítulo cuando habló sobre la Verdad “Y es que esta orden es la orden de la verdad. Aquello de Veritas, tiene que seguir resonando hoy entre nosotros, pero no mi verdad, sino la verdad que es Dios. Dios nos ofrece su amor para ponerlo en práctica a través de una vida llena de verdad”.
Continuando con su predicación a los hermanos, el provincial dijo: “en el evangelio se nos habla de la mística de lo nuevo, la alegoría de la vid, la hemos estudiado muchas veces, ¡volvamos a la raíz!. Hay una línea muy importante hoy; y es la raíz.” A modo de reflexión, fr. Mariano se hizo la pregunta de: “¿Dónde está la raíz nuestra hoy?, al mismo tiempo que respondió: ¡pues es el amor de Dios! Y si esa raíz es Dios, por ende la vid es Jesús y por ello estamos llamados a permanecer en él, junto a él; solo junto a Él podremos dar fruto. La vida cristiana es una invitación a estar unidos a Él para dar buenos frutos. Guardar sus mandamientos, es tener la intención de permanecer siempre en Él”
Para fr. Mariano, el principal mandamiento en este caso es guardar con celo apostólico cada talento que el Señor nos ha dado, para ponerlo al servicio de la comunidad. “Jesús nos deja su testamento. Veía la falta de amor fraterno. Hoy hay que tener detalles de amor fraterno. Tener en cuenta el talento del otro como un gran regalo que se entrega, para que nuestra alegría sea completa, esto es el amor compartido”.
Hace unos días, le tocó a fr. Mariano predicar en una de la eucaristía dentro del capítulo, en ella habló sobre ser sal y luz en medio de la sociedad que nos toca vivir a cada uno, por ello recordó que “en cualquier cosa que hagamos estamos llamados a iluminar y a dar sabor de evangelio, pero con alegría y plenitud”. Respecto a una vida llena de entrega, invitó a seguir el ejemplo de nuestros padres mayores “Me llamó la atención siempre ver a los frailes ya casi arrastrando sus pies llenos de cansancio físico por su entrega, y aún así, sonriendo, sintiéndose realizados y llenos, muchos de ellos con rosario en mano en los claustros de este convento, donde tan buenamente son atendidos en la enfermería”.
Invitó a vivir una fe autentica “La fe es real, no es una mentira. Vivir una fe real garantiza que haya una alegría completa. Y esta alegría es completa, cuando se está con Dios, la raíz de todo nuestro trabajo”.
“Hermanos, les invito a rezar unos por otros, eso se logra si estamos unidos a Jesús con sinceridad, solo en esta fe y en este amor real, puede haber crecimiento y prosperidad. El rezar y orar unos por los otros muchas veces evita que digamos cosas que no son, o decirlas con intención de herir, hay palabras que hieren y lastiman".
Concluyó: “Ahí está la historia de nuestra provincia ¿Cuántas provincias hemos creado allí donde nos necesitan? Hermanos, eso se logra con una vida en comunidad. El pez vive en el agua. No sale del agua porque muere. Si no sabemos compartir el amor real cada día en comunidad, seremos como peces fuera del agua. Al final podremos saber mucho, pero si eso nos lo guardamos, si no lo damos, si no lo multiplicamos, no seremos predicadores”.
“Que hoy como a Santa Rosa de Lima, nos vean como dominicos, dedicados totalmente a nuestra misión de vivir una fe real y en el amor fraterno. Que no falte en nuestras oraciones el rezar unos por otros. Y rezar por mí, por los que me acompañarán en el equipo de fortalecer nuestra provincia en la Orden, de quienes estamos y no están aquí. Que la oración sea nuestra base. Amen”
Fotografía y Texto: Fr. Marcos García.