Casa de Jesús Divino Obrero - San Blas

Ubicación y contacto
Casa de "Jesús Obrero"
C/ del Castillo de Uclés, 26
28037 Madrid
Tel: 913 044 109
La casa de Jesús Obrero está situada en el barrio de Simancas (San Blas), una zona populosa al nordeste del gran Madrid. Fue fundada y entregada a la Provincia en el año 1966 por el entonces arzobispo de la diócesis Mons. Casimiro Morcillo. De hecho comenzó a funcionar con jurisdicción propia en 1969, con servicio de despacho en la misma casa donde vivían los religiosos allí asignados y el culto dominical en un espacio prestado del Colegio Nacional República de Chile.
En 1971 se abrió un colegio de religiosas en la demarcación parroquial, y su capilla fue utilizada los domingos para el culto, hasta que por fin, en 1973, se inauguró el Complejo Parroquial que actualmente existe. Dicho complejo consta de templo, salón parroquial, varias salas de reuniones y la casa parroquial.
Los religiosos que han pasado por la parroquia hasta el día de hoy han formado siempre comunidad de tres o cuatro miembros. Su configuración como comunidad ha sido muy diversa. Y, bien pensadas las cosas y analizados los acontecimientos, esta comunidad ha sido y es un documento de lectura bastante fiel de los momentos por los que ha pasado la Iglesia y sociedad española durante los años 70’ y 80’. Es preciso decir que en los proyectos de vida y de trabajo de los religiosos siempre hubo buena voluntad y deseo de vivir al ritmo del tiempo y al servicio de las gentes de este lugar, no siempre fáciles de ganar para la causa del Evangelio.
Se tienen en ella los servicios normales de una acción pastoral planificada, a nivel de la Palabra de Dios, del Culto y de la Acción Caritativa y Social. La celebración de la liturgia, sobre todo en los tiempos fuertes del año, es sencilla, pero igualmente esmerada y transparente. Los servicios caritativos y de asistencia social se llevan a cabo junto con las otras parroquias del arciprestazgo.
La vida comunitaria trata de acompañar este trabajo y se busca el ritmo oportuno para poder cubrir las obligaciones parroquiales y otros trabajos apostólicos.